La senadora y precandidata presidencial María Fernanda Cabal encendió las alarmas dentro del Centro Democrático al advertir que hay un intento de “destruir” el proceso de selección del candidato para las elecciones de 2026.
Cabal aseguró que el partido llevaba un año preparando este mecanismo, pero que en las últimas semanas surgieron maniobras que buscan desestabilizarlo. “Este ruido no le sirve al Centro Democrático. Solo genera cansancio y desorden en un momento crucial”.
La precandidata apuntó directamente a la campaña de Miguel Uribe Londoño, como responsable de filtrar cartas y actas internas para generar desorden en el proceso para escoger candidato presidencial, presionar la salida de la encuestadora AtlasIntel, encargada de medir a los aspirantes.
“Yo no creo que Miguel sea el destructor del partido, pero sí ha sido un instrumento. Su campaña hizo públicas discusiones que debieron quedarse dentro del partido”, señaló. Según Cabal, el propósito de esas filtraciones era provocar que la encuestadora se retirara por miedo a afectar su reputación.
Cabal pidió a los militantes y a la bancada “rodear al partido y a su director, Gabriel Vallejo”, a quien describió como una persona con “estatura moral”, y exigió a la campaña de Uribe Londoño responder la carta enviada por la dirección del CD. “No se puede seguir evadiendo el fondo del problema con videos que no dicen nada”, advirtió.
La senadora también cuestionó la doble militancia de algunos dirigentes, como José Obdulio Gaviria, quien hoy apoya otra campaña. “Eso vulnera nuestra capacidad de triunfo. No se puede construir partido mientras se juega en dos canchas”, dijo.
Frente al futuro del proceso interno, Cabal insistió en que los cuatro precandidatos están dispuestos a llegar a un acuerdo, ya sea convenciendo a AtlasIntel de retomar el trabajo o buscando otra encuestadora internacional. “No vamos a dejar que el esfuerzo de años de oposición se diluya”, sostuvo.
También rechazó el “poder de veto” que, según ella, ejerce la campaña de Uribe Londoño, algo que considera “inadmisible” y sin respaldo en los estatutos del partido. Aseguró que el CD estaba listo para tomar una decisión en la última reunión, pero las filtraciones generaron zozobra y terminaron alejando a la encuestadora.
Finalmente, propuso que, si no hay unanimidad, la decisión sea tomada por mayoría o directamente por el director del partido y el expresidente Álvaro Uribe Vélez.