El presidente ejecutivo de Fedegán, José Félix Lafaurie, lanzó una contundente crítica al manejo fiscal del gobierno del presidente Gustavo Petro, asegurando que su administración “chapalea” en un pantano de decisiones erráticas que podrían llevar al país a una grave crisis económica.
En su más reciente columna titulada “Como vaca en pantano…”, el dirigente gremial arremetió contra lo que calificó como un “acto de desesperación” del Ejecutivo, al intentar implementar un proyecto de decreto que aumentaría las tarifas de autorretención y las bases de retención para 400 actividades económicas, lo que representa una carga adicional para empresas y ciudadanos.
“El gobierno ha tratado de meterle la mano al bolsillo a las personas y a los sectores productivos, como si el banco les exigiera, de un día para otro, aumentar la cuota de su préstamo en más del 100%… porque sí”, escribió Lafaurie. “Eso obligará a muchos a endeudarse, dejar de invertir o despedir empleados para anticipar un impuesto que no estaba presupuestado”.
Lafaurie recordó que desde 2023 la Contraloría General de la República ha venido advirtiendo sobre una peligrosa sobreestimación de los ingresos del Estado y un gasto desbordado, especialmente en burocracia, que no ha sido corregido. Este mes, el contralor Carlos Hernán Rodríguez confirmó ante la Comisión Legal de Cuentas del Congreso que “la situación económica y fiscal es compleja”.
Los datos son alarmantes: la ejecución presupuestal en 2024 fue la más baja en una década, las reservas presupuestales pasaron de $31,7 a $67,1 billones entre 2022 y 2024, y el recaudo tributario alcanzó su nivel más bajo en seis años. Además, la deuda del Gobierno Central se disparó al 57% del PIB.
El Comité Autónomo de la Regla Fiscal (CARF) también ha sido enfático al advertir sobre el incumplimiento de las metas fiscales por factores como el crecimiento del déficit primario, la caída de ingresos, el aumento del gasto y los crecientes costos de financiamiento, lo cual ha disparado el riesgo país.
Para Lafaurie, el gobierno ha preferido soluciones improvisadas como la Reforma Tributaria de 2022, el reajuste de la retención en la fuente en 2023 y una fallida Ley de Financiamiento que no logró aprobación en el Congreso, dejando el presupuesto de 2025 con un déficit estimado entre $12 y $28 billones.
Ahora, denuncia el dirigente, se estaría recurriendo a nuevas medidas fiscales sin discusión, con el aparente objetivo de conseguir recursos que algunos interpretan como parte de una estrategia de financiamiento electoral de cara al 2026.
“El Gobierno soluciona su crisis temporal de liquidez, pero en 2026 se abrirá un hueco mayor, porque deberá devolver saldos a favor de impuestos anticipados, lo que desajustará aún más un presupuesto que es de caja”, explicó.
Distintas entidades como la Contraloría, el CARF, el Consejo Gremial Nacional, la academia, expertos y exministros coinciden en la solución: recortar el gasto público. Sin embargo, Lafaurie advierte que el Ejecutivo no parece dispuesto a escuchar, aferrado a una visión ideologizada de la economía que tilda a la crítica como “codicia capitalista”.
“El riesgo no es que se hunda la vaca en el pantano, sino que arrastre al país”, concluye Lafaurie, dejando en claro que la advertencia está hecha, pero que el gobierno prefiere ignorar las voces técnicas y gremiales que claman por responsabilidad fiscal.
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