La ciudad de Charlotte se convirtió en el escenario de una semifinal histórica de la Copa América 2024, donde la selección de Colombia logró un emocionante triunfo de 1-0 sobre Uruguay, asegurando su pase a la final del torneo por primera vez en 23 años.
Desde el comienzo, el partido estuvo lleno de intensidad y momentos electrizantes. Uruguay, con un inspirado Darwin Núñez al frente, fue el primero en generar peligro. El delantero del Liverpool tuvo varias oportunidades claras para abrir el marcador, pero la precisión no estuvo de su lado y el arco colombiano permaneció invicto.
El gol decisivo llegó al minuto 39. James Rodríguez, quien ha sido fundamental para Colombia durante todo el torneo, ejecutó un tiro de esquina perfecto. El centro llegó a la cabeza de Jefferson Lerma, quien con un potente remate venció al portero uruguayo, desatando la euforia en las gradas llenas de hinchas colombianos.
Sin embargo, la alegría de los cafeteros se vio momentáneamente empañada justo antes del descanso. Daniel Muñoz, en un momento de frustración, respondió a una provocación con un codazo a Manuel Ugarte, lo que le valió la tarjeta roja directa y dejó a su equipo con diez hombres para la segunda mitad.
En el segundo tiempo, el técnico Néstor Lorenzo tuvo que reconfigurar su estrategia. Con un hombre menos, Colombia se enfocó en defender su ventaja y aprovechar los contragolpes. Uruguay, desesperado por el empate, introdujo a su veterano delantero Luis Suárez, quien estuvo a punto de igualar el marcador con un potente disparo que se estrelló en el poste.
A pesar de la presión uruguaya, la defensa colombiana se mantuvo firme. Incluso con diez hombres, Colombia tuvo oportunidades para aumentar la ventaja, pero Mateus Uribe falló en dos ocasiones claras frente al arco.
El pitazo final desató una celebración desbordante entre los colombianos. La última vez que el equipo había llegado a la final de la Copa América fue en 2001, cuando se coronaron campeones al vencer a México. Ahora, con la posibilidad de enfrentar al vigente campeón Argentina en la final, Colombia sueña con repetir la hazaña y levantar su segunda Copa América.
La victoria no solo es un logro deportivo, sino también una muestra del carácter y la resiliencia del equipo, que supo sobreponerse a la adversidad y mantener la calma bajo presión. Los aficionados colombianos en todo el mundo esperan con ansias la final, confiando en que su equipo puede volver a hacer historia.