En Cartagena, la senadora y precandidata presidencial del Centro Democrático, María Fernanda Cabal, lanzó este jueves una advertencia directa a una delegación del Congreso de Estados Unidos: “La democracia en Colombia está en grave peligro”. El pronunciamiento se dio durante un desayuno convocado por el encargado de negocios de la Embajada estadounidense, John McNamara, en el Hotel Hyatt Regency, al que asistieron los senadores Bernie Moreno (Partido Republicano) y Rubén Gallego (Partido Demócrata).
Cabal entregó cartas personalizadas a los legisladores norteamericanos y otra al secretario de Estado, Marco Rubio, en las que denunció un patrón de persecución judicial contra la oposición, el asesinato de líderes políticos y el avance del narcotráfico bajo el gobierno de Gustavo Petro.
“Tenemos al jefe de la oposición, Uribe, preso. Y tenemos un precandidato presidencial asesinado. No hay garantías para la oposición. Si no hay oposición, no hay libertades; si no hay libertades, no hay democracia”, afirmó.
En una carta que fue entregada durante el encuentro, Cabal cuestionó la reciente condena de 12 años de detención domiciliaria contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez, calificándola de “injusta” y “políticamente motivada”. Aunque su partido, dijo, acata la decisión por respeto institucional, la rechaza por considerarla un acto de “sesgo judicial”.
Recordó que en 2021 recibió información de inteligencia sobre un plan de la Segunda Marquetalia, dirigida por alias Zarco Aldinever, para atentar contra ella o su familia, ofreciendo una recompensa de mil millones de pesos. Según la senadora, el mismo cabecilla ordenó el atentado que costó la vida del senador y precandidato Miguel Uribe el pasado 7 de junio.
Pese a la peligrosidad de Zarco Aldinever, denunció que la Fiscalía suspendió decenas de órdenes de captura contra él bajo la política de “Paz Total”, lo que le permitió seguir operando hasta su muerte el 5 de agosto en un enfrentamiento entre grupos narcoterroristas.
Cabal afirmó que el país enfrenta la cifra más alta de cultivos ilícitos en su historia, con 300.000 hectáreas de coca, y acusó a Washington de no reflejar este incremento en sus estadísticas oficiales.
En este contexto, pidió reactivar una alianza similar al Plan Colombia, pero adaptada a la magnitud actual del problema: “Necesitamos un aliado nuevamente como en el pasado. Necesitamos volver a tener un nuevo Plan Colombia para organizar este país”, sostuvo.
La misiva enviada a Marco Rubio incluyó críticas a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), que tras siete años emitió sus primeras condenas contra el Secretariado de las FARC por secuestros masivos, mientras varios de sus miembros ocupan curules en el Congreso y, en caso de condena, recibirán penas “restaurativas”.
Recordó que, en enero de 2021, la JEP documentó que las FARC fueron responsables de 21.396 víctimas de secuestro, además de homicidios, torturas y desplazamientos forzados. “Hoy esos criminales están libres, mientras se persigue a la oposición”, advirtió.
La precandidata vinculó la coyuntura colombiana con un patrón regional de erosión democrática, acusando al presidente Petro de seguir una “hoja de ruta” de regímenes autoritarios que utilizan propaganda financiada con recursos públicos, atacan al Congreso y a los órganos de control, y manipulan el sistema judicial para neutralizar adversarios.
“Hoy más que nunca, Colombia necesita el apoyo de sus aliados históricos para apartarse del abismo. Hoy más que nunca debemos estar en el lado correcto de la historia”, enfatizó Cabal, quien solicitó formalmente una reunión con Marco Rubio para discutir cooperación en seguridad, lucha contra el narcotráfico y defensa de la democracia.
Con esta ofensiva diplomática, la senadora busca internacionalizar su denuncia y advertir que, a su juicio, el futuro democrático del país se juega en la recta hacia las elecciones presidenciales de 2026.