El Concejo de Medellín otorgará la distinción Juan del Corral en Nota de Estilo al politólogo argentino Agustín Laje, quien se ha convertido en una de las voces más influyentes de la última década en la batalla cultural contra el progresismo y el avance del globalismo.
El próximo 7 de mayo, la ciudad de Medellín recibirá al escritor y conferencista Agustín Laje, autor de obras clave para el pensamiento conservador contemporáneo en Iberoamérica. Su visita estará marcada por un reconocimiento institucional: la distinción Juan del Corral en Nota de Estilo, propuesta por el concejal Andrés Felipe Rodríguez, “El Gury”, y respaldada por los concejales Sebastián López, Santiago Narváez, Brisvani Arenas, Leticia Orrego, Claudia Carrasquilla y Luis Guillermo Vélez.
El reconocimiento destaca su labor intelectual, su defensa del pensamiento libre y su constante denuncia de lo que él denomina “la maquinaria globalista” y las ideologías que la sustentan. Para Rodríguez, esta condecoración representa “un acto de resistencia frente al avance de discursos totalitarios disfrazados de tolerancia”, y reivindica la necesidad de abrir espacios institucionales a las voces que han sido sistemáticamente marginadas del debate público.
Desde la publicación de El libro negro de la nueva izquierda, junto con Nicolás Márquez, Laje se consolidó como referente en la crítica al progresismo, a la ideología de género y al feminismo de cuarta ola. Su enfoque, polémico para algunos, ha sido celebrado por otros como una reivindicación del sentido común y la libertad de pensamiento. Su influencia se ha extendido especialmente entre las generaciones jóvenes, donde ha encontrado un canal poderoso de difusión a través de las redes sociales, luego de haber sido excluido por medios tradicionales y universidades.
Su más reciente obra, Globalismo: Ingeniería Social y Control Total en el Siglo XXI, ha intensificado el debate. En ella, Laje sostiene que el globalismo no es simplemente una evolución de la globalización, sino un nuevo régimen político que busca disolver las soberanías nacionales bajo la figura de una “gobernanza global” controlada por élites sin patria ni mandato democrático. Para el autor, el globalismo es “el proyecto político más ambicioso y peligroso de la historia humana”, que utiliza ideologías como el progresismo y el wokismo para reconfigurar la sociedad y eliminar las identidades nacionales, religiosas y culturales.
El libro alerta sobre un proceso de ingeniería social que, según Laje, está alcanzando su punto culminante mediante el uso de tecnologías, organismos internacionales y discursos como “diversidad, equidad e inclusión”, que actuarían como mecanismos de control ideológico. Además, plantea una estrategia de resistencia que incluye una “alianza global de patriotas” para librar la batalla cultural y recuperar el control de los Estados por la vía electoral.
El reconocimiento del Concejo de Medellín a Laje no ha estado exento de controversia. El concejal del Pacto Histórico, José Luis Marín (“Aquinoticias”), solicitó votación nominal y fue el único en votar en contra. Sin embargo, la mayoría de la corporación respaldó la distinción, marcando un punto de inflexión en el ambiente político y cultural de la ciudad.
Para los seguidores del politólogo argentino, este acto representa mucho más que un homenaje individual: es un símbolo del cambio de clima ideológico en Medellín, una ciudad que busca posicionarse como bastión de pensamiento crítico frente a las agendas globalistas y progresistas. “Si Antioquia resiste, Colombia se salva”. Y en esa resistencia, Agustín Laje se convierte en un referente al que hoy se le abren las puertas del reconocimiento institucional.