Carrusel de contratistas, obras sin terminar, presupuestos inflados, equipos de cómputo formateados, más de mil tramites sin responder, la sede sin internet, sin vigilancia, cámaras de seguridad apagadas y muchas irregularidades más fue lo que encontró Paula Palacio, la actual directora del Área Metropolitana
Y aunque han pasado más de tres meses la entidad sigue en proceso de recuperación pues ni siquiera han podido contratar el personal necesario ya que “los atornillados” de Daniel Quintero siguen al interior de la entidad.
La reestructuración administrativa actualmente enfrenta demandas por parte de algunos funcionarios de la entidad, ya que los actos administrativos que la respaldan fueron expedidos con violación de las normas requeridas, incluyendo la falta de un estudio técnico y viabilidad financiera, ausencia de competencia, expedición irregular, motivación falsa e indebida, entre otros aspectos.
Un informe reveló que se solicitó la creación de 128 cargos, de los cuales el año pasado se crearon 25 sin haber sido anunciados en un concurso interno. Además, se realizaron 14 nombramientos entre junio (un día antes de iniciar la Ley de Garantías) y octubre, 2 en noviembre y 10 a finales de diciembre. Los perfiles no fueron creados objetivamente según las necesidades de la entidad, sino subjetivamente en función de las personas que se pretendía nombrar. Se evidenció un posible conflicto de intereses en los nombramientos para ocupar los cargos.
Además, la información técnica y financiera relacionada con la reestructuración es insuficiente y plantea numerosas interrogantes. Por ejemplo, el programa EnCicla, relacionado con la movilidad activa y humana, fue incluido en el equipo de Transporte Colectivo, mientras que se suprimieron cargos importantes como el de Asesor Jurídico de la Subdirección de Transporte. El proceso adoptado no cumplió con el objetivo de fortalecer los procesos misionales clave dentro de la entidad, tal como se había fundamentado.»
El Área también firmó dos contratos con la secretaría de la No Violencia por 1.500 millones de pesos, para realizar actividades y acciones logísticas tercerizadas a través de Plaza Mayor y Metroparques, de las cuales actualmente no se cuenta con la claridad ni con los soportes suficientes que detallen la ejecución de los recursos involucrados.
Los indicadores del Plan de gestión al parecer fueron ficticios ya que no se encuentran soportes del cumplimiento, el sistema de ENCICLA quedó deteriorado
En 2022 y 2023 no se hicieron los aportes como socios para la capitalización de la Promotora Ferrocarril de Antioquia
Por si fuera poco, los desembolsos entregados por el AMVA a la Fundación Arca por más de tres mil millones de pesos no cuentan con un informe de ejecución que contenga los respectivos soportes financieros y el informe de avance físico, con la aprobación y el recibo a satisfacción del supervisor como lo establecen los estudios previos de estos contratos. Mientras que con la Fundacion Tenarco, el Área Metropolitana tuvo en 2020 tres contratos con la Fundación el primero por $450.000.000, (aunar esfuerzos para sensibilización y orientación a la comunidad metropolitana en acciones y prevención del riesgo por el COIVD-19) el segundo por $ 449.050.000 (sensibilización cultura ciudadana frente a calidad del aire y el tercero por un valor de $ 800.000.000 (actividades culturales y artísticas “Mi Valle Navideño”), bajo contratación directa, y aunque la Fundación se obliga a entregar $578.214.250, aporte que debió hacerse en efectivo, de acuerdo con el informe de auditoría interna de la entidad, no hay evidencia de dicho pago.