A tan solo un año de haber asumido la alcaldía de Cali, Alejandro Eder presentó un balance de su gestión, destacando logros significativos en áreas clave como la infraestructura, la seguridad y la educación. En su rendición de cuentas, el mandatario subrayó que, a pesar de los retos, su primer año de gobierno fue positivo para la ciudad, con avances sustanciales y una visión clara hacia el futuro.
Gestión destacada en infraestructura y seguridad
Eder no ocultó su satisfacción al señalar que la ejecución presupuestal alcanzó el 90%, el índice más alto en los últimos tres gobiernos. “Este ha sido un año muy positivo. Hemos recuperado 100 km de vías, un avance crucial para la movilidad de la ciudad”, comentó, resaltando la importancia de la infraestructura como motor de desarrollo.
Uno de los aspectos más destacados fue la reducción de los índices de violencia. Cali, históricamente marcada por altos niveles de criminalidad, logró una disminución del 7% en homicidios. “Por primera vez en décadas, tenemos la posibilidad de cerrar el año con menos de 1.000 homicidios. Este es un avance que, aunque modesto, es un reflejo de lo que estamos haciendo bien”, afirmó.
Eder reconoció que los desafíos en seguridad persisten: “Los retos siguen siendo enormes, seguimos siendo una ciudad tremendamente violenta, por eso vamos a redoblar esfuerzos para recuperar la seguridad que Cali tanto necesita”, expresó.
Impulso a la educación y empleo
El alcalde también destacó avances en educación, mencionando con orgullo la reducción de la deserción escolar. “Logramos en un año lo que proyectábamos alcanzar en todo el cuatrienio. Hay muchos avances en la dirección correcta”, aseguró.
De cara al futuro, Eder anunció el proyecto “Invertir para Crecer” como su gran apuesta para 2025. Esta iniciativa contempla una inversión de 3.5 billones de pesos para financiar obras públicas que generarían alrededor de 30.000 empleos. “Con estas obras, esperamos que la ciudad experimente un crecimiento sostenido”, afirmó.
Un futuro con grandes desafíos
A pesar de los avances, el alcalde fue claro: “Aún queda mucho por hacer, pero terminar este primer año así representa un balance positivo para la recuperación de Cali.”
Con una agenda definida y objetivos claros, Alejandro Eder reafirma su compromiso de transformar a Cali en un lugar mejor para vivir, trabajar y soñar. El camino es largo, pero el primer paso ya ha sido dado.