La Policía y la Fiscalía desmantelaron una red criminal que utilizaba bebés de hasta un mes de nacidos y niños de la comunidad indígena Embera Katío para la mendicidad en el parque Lleras, Provenza, El Poblado y otros puntos de Medellín.
En el operativo, denominado “La cara oculta de la caridad”, fueron capturadas siete personas acusadas de explotación de menores y concierto para delinquir. Según las autoridades, los delincuentes abordaban principalmente a turistas extranjeros para pedir dinero, leche, pañales y medicamentos, elementos que luego eran revendidos.
Las investigaciones, que se extendieron por 10 meses, revelaron que la red alcanzaba ingresos cercanos a $180 millones mensuales. Además, la Policía de Infancia y Adolescencia documentó más de 900 casos de protección a menores que eran reincidentes en esta práctica.
El secretario de Seguridad, Manuel Villa Mejía, advirtió que la ciudad no será permisiva: “En Medellín no habrá tolerancia con quienes atenten contra la niñez. Vamos tras quienes persistan en estas conductas delictivas y no vamos a permitir que la ciudad retroceda frente a la criminalidad”.
Los capturados quedaron a disposición de la Fiscalía General de la Nación, mientras avanzan las investigaciones para ubicar a otros integrantes de la red.