El Centro Democrático desmiente a Miguel Uribe: la carta que deja al descubierto su intento de manipular la encuesta interna

La crisis interna del Centro Democrático sigue creciendo, y todo apunta a un responsable: Miguel Uribe Londoño. Luego de que denunciara supuestos “vetos y sesgos” en la elección de la encuestadora que definirá al candidato presidencial del partido, una nueva carta —esta vez firmada por el propio director nacional, Gabriel Vallejo— dejó al descubierto las incoherencias del precandidato.

En el documento, fechado el 7 de noviembre y revelado por W Radio, Vallejo responde con contundencia a los señalamientos del senador y le exige claridad sobre un tema que ha generado malestar dentro de la colectividad: el intento de su equipo por contratar directamente a la firma Atlas Intel, la misma encargada oficialmente de realizar el estudio que definirá el nombre del aspirante único del uribismo para las elecciones de 2026.

“En aras de la claridad y transparencia que exige este proceso, quiero preguntarte si alguno de tus asesores contactó a la firma Atlas Intel y le propuso en algún momento contratarla o solicitar sus servicios”, advierte Vallejo en la carta.
El director del partido recordó además que la colectividad había formalizado la solicitud de propuesta a Atlas Intel el 17 de octubre de 2025, por lo que cualquier intento paralelo de contacto sería una grave falta de ética dentro del proceso interno.

La respuesta de Vallejo no solo desmiente la narrativa de victimización que ha querido instalar Uribe Londoño, sino que confirma las sospechas de varios dirigentes que ven en sus recientes actuaciones un intento de implosionar el partido desde adentro.
El tono del director del Centro Democrático fue claro: “Por respeto a los demás precandidatos, omitiré por ahora responder al contenido de tu comunicación, cuyo lenguaje y términos no se compadecen con el trato que el partido y mi persona hemos tenido contigo”. Una frase que refleja el creciente malestar por la actitud confrontacional de Miguel Uribe.

Fuentes internas señalaron que la carta de Vallejo representa un llamado a la mesura y al respeto institucional, luego de que Uribe Londoño filtrara a los medios su inconformidad con el proceso. “No es la primera vez que Miguel actúa de forma calculada, buscando convertir una discusión técnica en un escándalo político”, aseguró un militante uribista cercano a la dirección nacional.

El episodio confirma lo que muchos en el Centro Democrático ya venían advirtiendo: Miguel Uribe no está construyendo unidad, sino buscando deslegitimar el proceso de elección interna. Su doble discurso —primero intentando contratar a la encuestadora y luego denunciándola públicamente— lo deja en una posición comprometida frente a sus compañeros de partido.

A medida que se acerca la fecha del 28 de noviembre, cuando se anunciará el candidato único del uribismo, las divisiones que ha sembrado Miguel Uribe Londoño amenazan con poner en riesgo la cohesión del movimiento.
En palabras de un miembro del Comité Nacional: “Lo que hace Miguel es dinamitar el proceso para victimizarse después. No hay nada más peligroso que un político dispuesto a destruir su casa solo porque no logra dominarla”.

El partido exige claridad, respeto y lealtad. Tres valores que, por ahora, Miguel Uribe Londoño parece haber olvidado.