La reforma laboral impulsada por el presidente Gustavo Petro ha sufrido un importante revés en el Congreso de la República. La iniciativa, que aún debe ser discutida en tercer debate en la Comisión Séptima del Senado, se enfrenta a un panorama adverso tras el anuncio de varios congresistas que han decidido respaldar su hundimiento.
En las últimas horas, las senadoras Lorena Ríos (Colombia Justa y Libres), Ana Paola Agudelo (Mira) y Berenice Bedoya (Alianza Social Independiente) se unieron a los legisladores que promueven una ponencia negativa, con la intención de frenar el avance del proyecto en el Capitolio Nacional. Con ellas, ya serían al menos ocho congresistas de la Comisión Séptima los que rechazan la reforma laboral.
El presidente Gustavo Petro se mostró molesto con la situación “Si la comisión VII hunde las reformas que necesitan los trabajadores y el pueblo de Colombia habrá una ruptura entre el Congreso y el Gobierno. Espero que no cometan tamaña irresponsabilidad con Colombia” seguidamente dijo que “la comisión VII en su mayoría ha traicionado al pueblo trabajador de Colom bia. Buscaremos que sea reversiblela decisión pero sobre el engaño nos llevan a la violencia” y en una tercera publicación convocó al pueblo a marchar “No hay otro camino. “No llores como niño lo que no pudiste defender como hombre”. Que cada trabajador o trabajadora salga a la calle a defender su derecho a una vida justa. El congreso niega las reformas que el pueblo votó. aseguró en su cuenta de X
“No amenace Petro, esto no es Venezuela. No se equivoque. Aquí hay separación de poderes y se deben respetar” respondió la senadora María Fernanda Cabal quien en su cuenta de X recalcó “Una reforma laboral no puede ser por el capricho de personajes que jamás crearon un empleo o hicieron empresa. Esta reforma llena de ideología no es la solución para un país que necesita libertades en la generación de empleo. Lo que pretendían era un aumento en los costos laborales, en aproximadamente un 34%. Esto podría afectar negativamente la generación de empleo y la sostenibilidad de las empresas, especialmente las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPymes). Gracias a los congresistas que defendieron la empleabilidad y la LIBERTAD”.
Uno de los principales argumentos en contra de la propuesta radica en el impacto económico que podría generar en la generación de empleo y la sostenibilidad de las empresas, especialmente las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPymes). De acuerdo con sus críticos, la reforma contemplaba un aumento de los costos laborales en aproximadamente un 34%, lo que podría afectar negativamente la contratación de trabajadores.
El Gobierno de Petro, que ha defendido la reforma laboral como una herramienta clave para mejorar las condiciones de los trabajadores en Colombia. Sin embargo, el creciente rechazo en el Congreso pone en duda la posibilidad de que la iniciativa logre avanzar en su trámite legislativo.