Jerónimo Uribe: “Para la historia, Álvaro Uribe ya es inocente”

En medio del que muchos han llamado “el juicio del siglo”, Jerónimo Uribe, hijo del expresidente Álvaro Uribe Vélez, publicó una contundente carta en la que expone sus reflexiones y conclusiones sobre el proceso judicial que enfrenta su padre por presunta manipulación de testigos. La misiva, que ha generado revuelo en redes sociales y círculos políticos, defiende la inocencia del exmandatario y plantea duras críticas a los protagonistas del caso.

Jerónimo relata que hace apenas una semana, al despedirse de sus nietos, el expresidente lo hizo con la posibilidad latente de que fuera la última vez que los viera en libertad. “Esa tristeza fue seguida de una profunda tranquilidad”, escribe, confiando en que la historia juzgará con objetividad las pruebas reveladas durante el proceso.

El hijo del exmandatario reconoce la complejidad del caso y se muestra empático con quienes lo han liderado, como la juez Carmen Helena Heredia, de quien destaca su “intenso ritmo de trabajo” ante uno de los procesos más mediáticos y delicados del país. “Cualquiera que sea su decisión, unos colombianos la amarán y otros la odiarán. Su fallo será estudiado en las facultades de derecho por muchos años”, señala.

También se refiere a la fiscal del caso, Angélica Monsalve Orjuela, a quien acusa de haber hecho comentarios despectivos contra la defensa, aunque reconoce la presión que supone representar a unas presuntas víctimas “de alta connotación política, protagonismo mediático y cercanas al presidente”.

Jerónimo subraya que, tras más de 20 mil interceptaciones telefónicas, no se escuchó a su padre impartir una sola instrucción ilícita y que ningún testigo acreditó haber recibido órdenes suyas. La Fiscalía –sostiene– basa su acusación exclusivamente en los testimonios de Juan Guillermo Monsalve y Carlos Enrique Vélez, ambos, según él, desacreditados.

“Monsalve fue desmentido por su padre, su hermano y hasta por su abogado, quien afirmó que tanto él como su expareja estaban mintiendo”, afirma. Respecto a Vélez, asegura que fue contradicho por varios testigos presentados por la misma Fiscalía.

Jerónimo critica la lógica de la acusación, que –según él– requiere suponer que Uribe lideró un entramado ilegal sin dar una sola orden, sin que haya pruebas de un segundo celular, y disimulando durante miles de llamadas interceptadas. Además, cuestiona la narrativa del senador Iván Cepeda, quien plantea que Uribe buscaba silenciar testigos para ocultar su pasado paramilitar. “¿Qué evidencia ha surgido del paramilitarismo de Uribe? La respuesta es muy sencilla: ninguna”, concluye.

La carta también resalta que incluso la hermana de Monsalve negó que su padre hubiera testificado bajo presión. Critica el testimonio del exjefe paramilitar Salvatore Mancuso, al que tilda de “declaración política, más cargada de rabia que de sustancia”, y señala que nunca pudo probar un vínculo criminal directo con Uribe.

Además, acusa a Cepeda de tener una relación cercana con paramilitares que han declarado contra Uribe y afirma que algunos testigos, como Monsalve, disfrutan de condiciones privilegiadas en prisión, supuestamente gracias a esa cercanía. “Monsalve, un delincuente condenado por secuestro extorsivo, vive mejor que el 99% de los presos en Colombia”, dice.

Finalmente, Jerónimo destaca el papel de la tecnología y la Inteligencia Artificial (IA) como herramienta para analizar el juicio de forma objetiva. “Muy pronto, profesionales y aficionados someterán el fallo al examen de la IA […] independientemente del sentido del fallo, para la historia, Álvaro Uribe ya es inocente.”