Las calles de Colombia volverán a llenarse de manifestantes antes de que termine el año, con una nueva convocatoria de protestas el 23 de Noviembre en rechazo a las políticas del presidente Gustavo Petro.
Esta movilización se perfila como una de las más significativas del año, reflejando el descontento de millones de colombianos con el actual Gobierno. Las manifestaciones, que ya han ganado fuerza en redes sociales, han sido programadas en ciudades como Bogotá, Cali, Medellín, Barranquilla, Cartagena, Bucaramanga, Manizales y Pereira, con la posibilidad de sumar nuevas localidades en los próximos días.
Según los organizadores, las marchas se convocan en respuesta a una serie de preocupaciones que han incrementado la indignación social: aumento de la corrupción, expansión de los grupos criminales, riesgos para el sistema de salud, falta de oportunidades laborales y una creciente percepción de irrespeto institucional por parte del Ejecutivo.
Josías Fiesco, uno de los líderes de la marcha en Bogotá, afirma que el evento ha crecido en relevancia porque “el común denominador es la indignación ante un Gobierno indolente”, refiriéndose a las decisiones del Ejecutivo, como priorizar la compra de cultivos de coca en lugar de focalizarse en ayudar a los sectores en pobreza extrema.
Por su parte, Jaime Arizabaleta, otro de los voceros de la protesta, subraya que la marcha no tiene afiliación partidista, sino que está abierta a todo aquel que quiera expresar su inconformidad con el Gobierno de Petro. “Será una marcha contra el peor Gobierno de toda la historia de Colombia”, afirmó Arizabaleta.
Las próximas protestas se suman a las movilizaciones del 21 de abril, cuando miles de personas salieron a las calles en diversas ciudades para expresar su rechazo a la gestión de Petro. En redes sociales, ciudadanos han compartido sus razones para unirse nuevamente a estas manifestaciones, enfatizando que el descontento no se ha disipado y que esta vez esperan una participación multitudinaria.