María Fernanda Carrascal: De crítica a protagonista del abuso de recursos públicos

La representante a la Cámara por el Pacto Histórico, María Fernanda Carrascal, ha quedado en evidencia tras una denuncia publicada por el periodista Daniel Coronell en la revista Cambio. Según el informe, un escolta de Carrascal aseguró que la congresista utilizó una camioneta blindada de la Unidad Nacional de Protección (UNP) para realizar un trasteo, lo que constituye un claro abuso de los recursos públicos.

La denuncia provocó un cruce de declaraciones en redes sociales entre la congresista y el periodista. Coronell, quien ha sido cercano a las posturas progresistas, no ocultó su decepción ante la hipocresía de Carrascal:

Daniel Coronell: “Tengo simpatía por la representante @MafeCarrascal pero sus explicaciones sobre este abuso son insuficientes.”

Carrascal, en lugar de asumir responsabilidades, se apresuró a justificarse con respuestas evasivas:

María Fernanda Carrascal: “Daniel, no es cierto que haya hecho un trasteo en el vehículo de mi esquema, la denuncia es imprecisa y el titular es tendencioso. Para ello contraté a una empresa especializada. Sí trasladé en el vehículo algunas cosas de valor y delicadas, como lo haría cualquier persona cuidando sus pertenencias.”

La congresista intentó desacreditar la denuncia argumentando que provenía de un escolta retirado por presuntas faltas en protocolos de seguridad:

“Esta ‘denuncia’ es la reacción de un hombre de seguridad que fue retirado de mi esquema con previo aviso de un mes y con todas las garantías, luego de incumplir protocolos de seguridad en un viaje al Catatumbo y en reiteradas oportunidades.”

Sin embargo, Coronell le respondió:

Daniel Coronell: “Respetada representante @MafeCarrascal, sí hizo parte de su trasteo en un vehículo de seguridad pagado por los contribuyentes. Eso es un abuso. Debió mover sus pertenencias en un carro suyo o pagado por usted.”

Carrascal, visiblemente incómoda, optó por la victimización:

“Se nota que no leyó ni reflexionó sobre lo que expongo. Yo no puedo usar otro vehículo para trasladarme porque para eso me ha sido asignado un vehículo para mi protección. Estos vehículos no solo son para cumplir obligaciones laborales sino también personales.”

De denunciante a denunciada

El escándalo ha sacado a relucir la hipocresía de Carrascal, quien entre 2011 y 2025 publicó más de 60 trinos criticando el uso y abuso de camionetas por parte de congresistas. Ahora, en un giro irónico, se encuentra en el centro de la controversia tras hacer exactamente lo que antes señalaba como corrupción.

Este episodio ha reavivado el debate sobre la transparencia en el uso de los recursos públicos y la falta de coherencia en algunos políticos que, cuando están en la oposición, denuncian los abusos, pero al llegar al poder parecen olvidar sus propios discursos.

Mientras la congresista se esfuerza por desviar la atención y minimizar el escándalo, los ciudadanosesperan respuestas claras y sanciones, si corresponde. La pregunta que queda en el aire es: ¿seguirá Carrascal señalando a los demás mientras se lava las manos de sus propias faltas?