En un esfuerzo conjunto entre la Alcaldía de Medellín y la Policía Nacional, se logró interceptar y confiscar más de 3 toneladas de marihuana que estaban destinadas a ser distribuidas en la ciudad. La operación se llevó a cabo en un parqueadero público en el barrio Prado del municipio de Bello, marcando un significativo golpe contra las redes de tráfico de drogas en la región.
El cargamento, que habría sido transportado desde el departamento del Cauca, estaba ingeniosamente camuflado entre productos comestibles en un camión. Este vehículo fue detenido gracias a una operación de inteligencia que permitió a las autoridades conocer tanto el momento como el lugar exacto de la distribución planeada.
Durante el operativo, cinco individuos fueron capturados mientras descargaban los paquetes de marihuana. Intentaron escapar al notar la presencia policial, pero fueron rápidamente detenidos y puestos a disposición de la Fiscalía General de la Nación. Se les acusa de los delitos de tráfico, fabricación y porte de estupefacientes.
Las investigaciones preliminares sugieren que este cargamento habría sido dividido en más de 3 millones de dosis, destinadas a ser vendidas en diferentes puntos del Valle de Aburrá, lo que representaría un impacto considerable en el mercado ilegal de drogas de la zona.
Se calcula que la venta de esta cantidad de marihuana podría haber generado beneficios superiores a los 7.500 millones de pesos para las organizaciones criminales involucradas. Este operativo no solo previno la distribución de una enorme cantidad de droga, sino que también desmanteló una cadena de suministro significativa en la región.