Tribunal avala interceptaciones ilegales a Uribe en 2018

El Tribunal Superior de Bogotá ha dado un revés a la defensa del expresidente Álvaro Uribe Vélez al avalar las interceptaciones telefónicas realizadas en 2018, las cuales han sido clave en la acusación en su contra por los delitos de soborno a testigos y fraude procesal.

Las interceptaciones fueron ordenadas inicialmente por la Corte Suprema de Justicia con el propósito de investigar al entonces representante a la Cámara Nilton Córdoba Manyoma, en el marco del escándalo de corrupción conocido como el Cartel de la Toga. Sin embargo, por un aparente error, las autoridades terminaron escuchando conversaciones del expresidente Uribe, incluidas algunas con su abogado Diego Cadena. Estas grabaciones fueron fundamentales para la medida de aseguramiento dictada en su contra en 2020 y para la posterior acusación presentada en mayo de 2024.

La batalla legal por las grabaciones

Desde el inicio del proceso, la defensa de Uribe ha argumentado que estas interceptaciones fueron obtenidas de manera irregular y, por tanto, no podían ser usadas como prueba en su contra. Incluso el delegado del Ministerio Público apoyó la solicitud de excluirlas del juicio, alegando posibles vulneraciones al debido proceso.

Sin embargo, el Tribunal Superior de Bogotá rechazó esta solicitud y ratificó la legalidad de las pruebas, respaldando así la decisión de la Fiscalía de incluirlas en el expediente judicial. Con este fallo, el juicio contra el exmandatario tiene vía libre para iniciar el próximo jueves 6 de febrero, fecha en la que Uribe deberá defenderse de las acusaciones que lo señalan de presuntamente haber ofrecido beneficios a exparamilitares presos a cambio de que declararan en contra del senador Iván Cepeda.